Lo más importante
Elemento | Descripción |
---|---|
Tiempo de preparación | 30 minutos (que se van volando) |
Dificultad | Fácil, como ver un video de gatos |
Porciones | 4 (o 2 muy hambrientos) |
Ingredientes
- 1 kilo de lomo de res (el rey de la carne)
- Sal al gusto (pero sin exagerar, que no estás en un concurso)
- 6 huevos (sí, ¡seis! No me preguntes por qué, simplemente hazlo)
- 2 ajos (no es una película de terror, pero sí hay que majarlos)
- 1 cebolla mediana (porque sabemos que esto no es una receta de dieta)
- Un toque de manteca (suficiente para hacer las cosas más deliciosas)
Paso a paso
Paso 1: Preparar el lomo
Primero, agarra ese lomo con la mano firme y dale un cariñito. Majar el ajo con un poco de sal es el primer paso. Imagina que estás destruyendo tus problemas, ¡solo que son ajos!
Paso 2: Sazonar bien
Usa esa mezcla de ajo y sal para condimentar el lomo. Aquí no hay límites, pero recuerda que la sal no debería ser el protagonista del plato, ¡solo una coprotagonista!
Paso 3: A calentar la manteca
Pon a calentar la manteca en una sartén, como si quisieras que el aceite se sienta amado. Una vez caliente, echa la carne (ten cuidado, que puede salpicar, te lo digo desde experiencia). ¡Ese sonido chisporroteante es música para tus oídos!
Paso 4: Agregar los huevos y la cebolla
Cuando la carne esté doradita, es hora de introducir esos seis huevos. Mueve todo con entusiasmo, como si estuvieras tratando de lograr el baile perfecto en una fiesta. Agrega la cebolla picada. ¡Vamos, que esto promete!
Paso 5: Freír y envolver
Una vez que los huevos estén cocidos y la mezcla fabulosa tenga un color dorado (porque no estás haciendo un platillo triste), envuelve todo en hoja de plátano. Si no tienes, ¡no entres en pánico! Una buena envoltura con papel aluminio también funciona.
Trucos y variaciones
¿Quieres sorprender a tus amigos? Prueba añadir un poco de queso derretido cuando estés friendo los huevos. Si quieres elevar tu juego, un poco de salsa picante en el acabado es un golazo. ¡Hazlo a tu manera!
Recomendación
Y ahí lo tienes, el lomo asado que hará que tus amigos se chiven por invitarte nuevamente. Si todo sale bien, tendrás una buena historia que contar en la próxima reunión: “¿Recuerdan esa vez que me quedé con un plato vacío?”. ¡A disfrutar y compartir la buena comida!