¿Por qué deberías hacer Marquesotes Lustrados?
Bueno, si estás leyendo esto, es porque probablemente ya sabes que estos deliciosos pastelitos son la manera perfecta de impresionar a tus amigos o, mejor aún, de tener un delicioso snack en casa. Con un sabor que definitivamente te hará volver por más, no hay nada como un buen marquesote para darle un gusto al paladar. ¡Y la mejor parte? Es más fácil de lo que parece!
Lo más importante
Descripción | Detalles |
---|---|
Tiempo de preparación | Unos 30-40 minutos (más tiempo de horneado) |
Dificultad | Fácil |
Porciones | 24 unidades |
Ingredientes
- 2 docenas de huevos
- 2 libras de pinol (sí, eso es un montón)
- 2 libras de azúcar
- Vainilla al gusto (¡no escatimes!)
- Cascaritas de limón (para ese toque especial)
Paso a paso
Preparación de los Marquesotes
- Primero, bate las claras de los huevos como si fueran tus problemas… hasta que estén bien espumosas.
- Después de 10 minutos, añade las yemas y sigue mezclando. ¡No queremos que se sientan solas!
- Ahora, agrega el azúcar. Hazlo poquito a poco y, entre nosotros, no lo batidas en exceso, solo métele cariño.
- Luego, es el turno del pinol y la vainilla. ¡Agrega hasta lograr la mezcla perfecta!
- Engrasa tu molde con manteca. Asegúrate de que no se pegue porque no queremos drama aquí.
- Hornea hasta que estén doraditos. Esto suele tomar un rato, así que aprovecha para disfrutar de un cafecito.
- Una vez horneados, córtalos en trocitos y ponlos a tostar. ¡Eso les dará el crujiente perfecto!
Preparación del Lustre
- Hierve 4 botellas de agua y agrega 4 libras de azúcar. Sí, lo sé, parece mucho, pero es parte del plan…
- Cuando la miel se espese, toma una cucharada y pruébala. Si puedes hacer una bolita en el agua y se mantiene, estás en el camino correcto.
- Asegúrate de tener las claras de 5 huevos batidas mientras esta miel está en su punto. Agrega esas claras a la miel rápidamente. ¡No querrás que se pasen!
- Finalmente, añade el espíritu de cola. Esto le dará ese sabor y color que todos queremos.
- Para bañar los marquesotes, perforalos con algunos palitos y sumérgelos en la miel. Un arte más que una ciencia, ¿cierto?
- Déjalos secar y, voilà, tienes un dulce espectacular listo para compartir o para guardar (¿o comer todo tú solo?).
Trucos y variaciones
Si quieres añadir un poco de locura a tus marquesotes, prueba agregar un poco de chocolate o nueces a la mezcla. ¡Quién dijo que no se puede innovar un clásico! Y si sientes que te quedó demasiado húmedo, un toquecito extra de pinol hará maravillas. Recuerda mantener todo en balance, no queremos un caos en la cocina.
Recomendación
Así que ahí lo tienes. Si al final todo sale bien, espero que disfrutes la receta. Te puedo asegurar que tus amigos estarán pidiendo más. ¡Y si no, al menos tendrás algo delicioso para ti mismo! Anímate a probarlo, ¡no te arrepentirás!